Después de dos meses de cierre a causa de la pandemia de coronavirus, reabrió hoy el Santo Sepulcro, en Jerusalén, con las mismas medidas de seguridad sanitaria que deben seguir todos los templos en Israel: distancia y barbijos
Según informó el custodio de Tierra Santa, el padre Francesco Patton, la reapertura completa se hará de manera progresiva, «en función de la relajación gradual de las restricciones» impuestas por la enfermedad.
Algunos llegaron a las 5 de la mañana y debieron esperar, junto a la prensa que cubría el evento, tres horas antes de que se abrieran las puertas, según mostró un video-reportaje de Fuente Latina.
Además de mantener la distancia sanitaria de dos metros entre las personas y la obligación de usar máscara tapabocas, la normativa nacional, que también aplica al Santo Sepulcro, establece que solamente pueden ingresar hasta cincuenta personas a la iglesia.
Además, los fieles y los visitantes no pueden tocar ni besar ningún elemento al interior del Santo Sepulcro, el lugar donde Jesús fue enterrado y resucitó, según las tradición cristiana.
Voceros de los administradores del lugar santo, citados por la agencia italiana ANSA, señalaron que la basílica «será accesible solamente para aquellos que no tienen fiebre o síntomas de infección».
