El Banco Europeo de Inversiones (BEI) alcanzó un acuerdo de colaboración con la Autoridad de Innovación de Israel (AII) y dispondrá una financiación de 50 millones de euros (unos 54 millones de dólares) para la firma Pluristem, cuya terapia en base a células madre de placenta está siendo probada, hasta ahora con éxito, para tratar las consecuencias del coronavirus
«Israel es el hogar de un próspero ambiente de nuevas empresas innovadoras, que dominan la industria de alta tecnología«, dijo Ambroise Fayolle, vicepresidente de Innovación del BEI, el órgano financiero comunitario de la Unión Europea.
Fayolle afirmó que «Pluristem es un excelente ejemplo de cooperación israelí-europea y el apoyo del BEI es especialmente oportuno, ya que le permitirá a la compañía desarrollar un tratamiento para los pacientes de COVID-19 más vulnerables».
Varias personas afectadas por el coronavirus recibieron en Israel la terapia desarrollada por Pluristem, con una tasa de supervivencia del 100 por ciento, y el tratamiento se extendió recientemente a un paciente en Estados Unidos.
El tratamiento se está llevando adelante en un hospital de Nueva Jersey en el marco del programa de Uso Compasivo regulado por la Food and Drug Administration (FDA), la agencia federal estadounidense que controla la aprobación y comercialización de remedios y alimentos en Estados Unidos.
A mediados del mes pasado, cuando se anunció el tratamiento del paciente norteamericano, el CEO de Pluristem, Yaky Yanay, dijo que su empresa está «recibiendo muchas consultas y solicitudes de tratamiento de proveedores de atención médica y familias de todo el mundo».
En el contexto del acuerdo con las autoridades israelíes, el BEI apoyará a Pluristem con un préstamo del tipo venture debt a través de su filial alemana, Pluristem GmbH.
Pluristem, que tiene su base en Haifa, en el norte de Israel, desarrolla terapias de medicina regenerativa utilizando células derivadas de la placenta, con el objetivo de tratar infecciones, isquemia, lesiones musculares y trastornos hematológicos, entre otros.
«La misión de nuestra compañía de aprovechar el poder de la medicina regenerativa» para mejorar el bienestar de la población «se ha vuelto más urgente que nunca, ya que trabajamos incansablemente para desarrollar un tratamiento para las complicaciones del COVID-19″, dijo Yanay.