Un proyecto internacional del que participa una experta israelí recibió un subsidio de 22 millones euros para seguir desarrollando un método para mejorar uno de los flancos débiles de la lucha contra la obesidad: la eficacia de los fármacos.
La doctora Sivan Spitzer, de la Facultad de Medicina Azrieli de la Universidad Bar-Ilan, junto con investigadores de seis países de la Unión Europea, obtuvo la prestigiosa subvención.
También le puede interesar: Proponen en Israel dejar de usar el índice de masa corporal para medir la obesidad
Esta financiación servirá para el desarrollo de una innovadora plataforma destinada a mejorar la adherencia al tratamiento farmacológico de los pacientes que sufren enfermedades cardiometabólicas.
La subvención de cinco años, otorgada por la Unión Europea (UE), reúne a investigadores líderes y gigantes farmacéuticos como Novo Nordisk, Pfizer y Sanofi para crear la iniciativa Carepath.
El proyecto Carepath se enfoca en los importantes desafíos que supone el tratamiento de la obesidad, la diabetes, la hipertensión y el colesterol alto, que afectan a millones de personas en todo el mundo.
Un obstáculo persistente
Estas enfermedades cardiometabólicas suelen requerir planes de tratamiento a largo plazo, pero a pesar de los avances en las terapias farmacológicas, la adherencia del paciente a la medicación sigue siendo un importante obstáculo para el éxito del tratamiento.
«La obesidad es una enfermedad compleja y multifacética que requiere un enfoque a largo plazo y centrado en el paciente», afirmó Spitzer, quien también se desempeña como subdirectora de The Russell Berrie Galilee Diabetes Sphere en la Facultad de Medicina de la Bar-Ilan.

Carepath, añadió, «tiene como objetivo mejorar la persistencia de los pacientes en la medicación, mejorando en última instancia la vida de las personas que luchan contra la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y la obesidad».
La plataforma integrará herramientas digitales y analógicas diseñadas específicamente para personas con diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares. Del proyecto participan además investigadores y organizaciones de Alemania, los Países Bajos, Polonia, España y Suecia.
Una esperanzadora «caja de herramientas»
Según se informó desde Ramat Gan, en la periferia de Tel Aviv, donde la universidad tiene su sede, los 22 millones de euros del programa de la UE se usarán para financiar el diseño y la implementación de la «caja de herramientas» del Carepath.
Como parte del plan, adelantaron, se realizarán estudios a gran escala para probar el impacto de la plataforma y evaluar su viabilidad económica.
«No nos centramos solo en el aspecto clínico, sino también en garantizar que la plataforma sea culturalmente relevante para diversas poblaciones de pacientes», enfatizó Spitzer.
Para seguir leyendo: ¿El cerebro nos puede ayudar a recuperarnos de un infarto?
A través de esta colaboración internacional -completó-, se busca «crear un sistema que aborde tanto los desafíos médicos como los sociales, integrando la innovación tecnológica con las necesidades reales de los pacientes».
Los voceros de la universidad indicaron que la plataforma se diseñará con especial énfasis en abordar la obesidad, una enfermedad que se asocia con más de 200 problemas de salud, entre ellos enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y diabetes tipo 2.