El avance de la inteligencia artificial (IA) generativa sobre el terreno del trabajo impactará en mayor medida a las mujeres, quienes se desempeñan en tareas mayoritariamente en riesgo de ser ocupadas por robots o computadoras en el futuro, advirtió el Banco de Israel (BoI).
La institución israelí divulgó un amplio informe con previsiones sobre los efectos que puede tener el imparable, y temido, avance de la IA sobre el trabajo humano, tanto las ocupaciones más tradicionales como los empleos en alta tecnología.
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«Se prevé que la IA generativa transforme significativamente el mercado laboral en los próximos años», señaló el BoI en un comunicado difundido desde Jerusalén, donde tiene su sede.
«Para preparar el mercado laboral para estos cambios -continuó-, es importante que el estado garantice la capacitación adecuada, tanto para los trabajadores en puestos que la IA podría reemplazar como para quienes ocupen puestos donde complementará el trabajo humano».
En ese sentido, el reporte apuntó que en el sector público cerca de dos tercios de los empleados «trabajan en profesiones en las que la IA generativa podría servir como factor complementario».
Los que ganan y los que pierden
«La integración de la IA en el sector público requerirá avances tecnológicos y la capacitación de los empleados -dijo el BoI-. Junto con la actualización de los convenios y regulaciones laborales, estas medidas pueden contribuir a una mayor eficiencia del sector».
Por otro lado, se prevé que la IA «genere nueva demanda en las industrias de alta tecnología, pero también reduzca la necesidad de muchas de las profesiones tecnológicas, ya que reemplaza muchas de sus tareas».
«Los empleados en estos campos -aconsejó el informe- deberán actualizar sus conocimientos y adaptarse a las cambiantes demandas del mercado» en la era de la inteligencia artificial.
Durante una conferencia de prensa que ofreció esta semana, el gobernador del Banco de Israel, el profesor Amir Yaron, advirtió que, en el país, uno de los sectores más vulnerables al avance de la inteligencia artificial es el de los ultra-ortodoxos.
Gran parte de esa población, añadió, se desempeña en «profesiones que corren un alto riesgo de ser remplazadas» por IA, lo que «agudiza la necesidad de habilidades generales que permitan cambiar» de oficio y recurrir, «por supuesto, a la formación».
El análisis, continuó Yaron en declaraciones recogidas por el diario Maariv, mostró que «las mujeres estarán más expuestas al impacto futuro de la inteligencia artificial generativa».
Las trabajadoras, indicó el jefe del BoI, representan «alrededor del 71 por ciento de los empleados en ocupaciones cuya demanda se espera que disminuya como resultado de la adopción de la IA».
En general, explicó el comunicado del organismo gubernamental israelí, la IA generativa realiza tareas relacionadas con el pensamiento repetitivo, «por lo que se espera que las ocupaciones que lo requieren se vean significativamente influenciadas por esta tecnología».
Adaptar la economía, con una mano del estado
«En cambio, se espera que el impacto en los trabajadores de profesiones que implican principalmente trabajo físico o técnico sea más moderado, siempre que la IA generativa no se integre de forma paralela en los robots», advirtió.
Los expertos que prepararon el informe dijeron, como vienen apuntando los especialistas alrededor del mundo, que la IA generativa «podría impulsar un rediseño del mercado laboral en los próximos años y un aumento de la productividad laboral».
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«Pero también podría provocar una reducción del empleo en ciertos sectores», sostuvieron. Por lo tanto, «el estado debe implementar medidas políticas para preparar la economía ante estos cambios y ayudar a los trabajadores que se prevé que se verán perjudicados».
Esas medidas «necesarias», precisó el comunicado del BoI, incluyen «programas de capacitación tecnológica, reciclaje profesional y soluciones adaptadas a los trabajadores de mayor edad».
