El programa Jewish Matchmaking (La celestina del judaísmo) es un gran éxito en Netflix con historias demasiado extraordinarias o complicadas, lo suficiente para ser entretenidas en el televisor. Pero, ¿y en la vida real? Esta casamentera judía de Nueva York tiene algunos consejos útiles.
Entrevistada por el periódico New York Jewish Week, la especialista Erika Ettin, de 42 años, que trabaja asesorando a personas que buscan amor en las aplicaciones online, arrancó dejando algo muy en claro: «no creo en el bashert«.
Se trata, por supuesto, de la palabra idish que se puede traducir como «destino», pero que se usa particularmente para describir al «alma gemela» que nos está esperando en algún lugar para conocernos y ser felices juntos.
«No creo que haya ‘una’ persona para todos, creo que muchas personas pueden hacerte feliz por diferentes razones», le dijo Ettin a la revista judía norteamericana.
New York Jewish Week señaló que el website de la casamentera, A Little Nudge, que arrancó en el 2011, ofrece varios servicios, comenzando por uno básico que cuesta 500 dólares y consiste en un minucioso asesoramiento para preparar el perfil ideal y elegir las mejores fotos para un perfil online.

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«A Little Nudge» se puede traducir como «empujoncito», que es lo que Erika brinda a sus clientes. «Les doy las herramientas que necesitan para salir» al sinuoso mundo de internet para conseguir pareja, explica.
«Que tu personalidad brille»
Por ejemplo, precisa, en los perfiles en las aplicaciones se debe destacar «cualquier cosa que permita que tu personalidad brille, muestre tus peculiaridades y se mantenga positivo».
También aconseja que «es más que un perfil: ser proactivo en los sitios es lo que te hace exitoso».
El sitio de Erika trabaja con pesonas de cualquier origen social y religión, no solamente judíos, aunque los aspirantes hebreos y hebreas al amor conforman cerca del 15 por ciento de sus clientes (en comparación con el cerca del 2,5 por ciento que representan los judíos en la población estadounidense general).
De todas maneras, siendo judía, Ettin tiene algunos consejos puntuales para los miembros de la tribu. La asesora «notó una tendencia entre sus clientes judíos: muchos de ellos quieren conocer a alguien que también sea judío», incluso si no son particularmente religiosos, señaló New York Jewish Week.

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El consejo de Ettin de esos clientes que quieren conocer a otro neoyorquino judío o judía es simple: «pague los filtros en las aplicaciones de citas para que puedan filtrar la religión», apuntó.
La ventaja de invertir 20 dólares
«Porque me hace reír cuando dicen ‘eso es un factor decisivo’ y luego se niegan a pagar los 20 dólares para usar el filtro» para la religión, exclamó.
Y si bien la especialidad de esta casamentera judía son las citas en línea, también tiene algunos consejos para la vida real.
Por ejemplo, Erika propone concurrir habitualmente a los lugares que nos gusten y adonde nos sentimos cómodos. «Y si allí conoces a alguien, es una ventaja adicional», afirma.
«Si ir a la sinagoga es importante para ti, encuentra una que realmente te guste y entonces ya estás en tu elemento -continua la experta-. Si conoces a alguien allí, es una ventaja adicional».
O, «si quieres tomar algún tipo de clase de cocina israelí, ya te estás divirtiendo porque es algo que quieres hacer».
¿Qué puede resultar de esto? Por supuesto: «si conoces a alguien, es una ventaja adicional» de aprender a preparar falafel, burekas o un rico desayuno israelí.