El canadiense Sylvan Adams, un magnate judío del sector de bienes raíces que inmigró a Israel en el 2015, donó 100 millones de dólares a la Universidad Ben-Gurion del Negev, como parte de un plan para relanzar el sur del país después del ataque terrorista del 7 de octubre.
Adams dijo que «después de la masacre» cometida por el grupo islamista Hamas, que mató a 1200 personas en la zona fronteriza con Gaza y secuestró a 240, «es importante fortalecer el sur de Israel para garantizar la seguridad de sus residentes y reconstruir la vida en el Negev».
El primer jefe de gobierno nacional, David Ben-Gurion, «tuvo una visión: entendió que el Negev es el corazón palpitante de Israel y es la fuente del crecimiento y el futuro del país», añadió el millonario.
«Les decimos a nuestros enemigos y al mundo en general que estamos aquí para quedarnos», aseveró el magnate judío.
La importancia de la universidad para la región
Al anunciar la donación, la universidad, que está ubicada en Beer Sheva, la «capital» de la desértica zona sur del país, recordó que ochenta y dos de las víctimas mortales del ataque formaban parte de su comunidad, entre estudiantes, profesores, equipos y sus familiares.

Con sus tres campus (también tiene sedes en Eilat y en Sde Boker, el kibutz donde Ben-Gurion residió en sus últimos años de vida-, la universidad es considerada el principal empleador de la región.
«El esfuerzo por fortalecer el Negev es más importante ahora que nunca», añadió Adams durante el anuncio de la donación en Toronto, Canadá. «Debemos asegurarnos -dijo- de que siga siendo la fuente de fortaleza para el futuro de Israel, a pesar de la terrible masacre».
Esta donación, dijo por su parte el profesor Daniel Haimowitz, presidente de la Ben-Gurion, «nos ayudará a allanar el camino a seguir para la comunidad universitaria y nos ayudará a restaurar y fortalecer el Negev, juntos».
Una donación que «eclipsa» a todas las demás
Según Haimowitz, «estamos pasando a la siguiente etapa, centrándonos en varias áreas clave de influencia, entre ellas el futuro del Negev y el estado de Israel, las tecnologías futuras, el cambio climático, la sostenibilidad y la calidad ambiental, y la salud global».

El aporte de Adams, destacó la Jewish Telegraphic Agency (JTA) al dar la noticia, «eclipsa todas» las donaciones previas a instituciones de educación superior de Israel -es la mayor de la historia del país hasta ahora- «y está a la par de algunas de las más grandes realizadas a cualquier universidad» en el mundo.
La JTA apuntó que el desembolso del magnate judío canadiense iguala «los llamativos obsequios que se anunciaron recientemente» para las universidades de Harvard y Duke en Estados Unidos.
Adams, recordó el medio judío estadounidense, es conocido por su pasión por el ciclismo. El millonario estableció el primer velódromo de Israel y trajo al país la etapa inaugural del Giro de Italia al país en el 2018, «a un costo personal de más de 20 millones de dólares».
También es propietario del equipo ciclista Israel-Premier Tech y ganó el campeonato mundial de ciclismo para su grupo de edad el año pasado, completó la agencia.