Más de 55000 discapacitados tuvieron que ser evacuados y se encuentran desplazados en el territorio de Israel, lejos de sus ambientes seguros, tras el ataque terrorista del 7 de octubre cometido por el grupo islamista Hamas.
Así se desprende de un panel realizado esta semana por el Jerusalem Press Club (JPC), en la capital israelí, durante el cual se discutieron las consecuencias del atentado entre las personas con discapacidades.
Los expertos destacaron que, desde el atentado, no solo están desplazadas miles de personas con discapacidad en zonas más alejadas de los cohetes de los grupos terroristas, a menudo en alojamientos desconocidos o inaccesibles, sino que muchos de ellos quedaron sin asistencia.
El «caos inevitable» de una alerta roja
Es que alrededor de 400.000 israelíes fueron convocados a filas para el servicio militar de reserva, por lo que muchos miembros del personal y cuidadores familiares simplemente no están disponibles, apuntaron.
Además, se señaló durante el panel, las personas con discapacidad motriz pueden tener dificultades para acceder a un refugio antiaéreo en menos de dos minutos cuando suena una sirena y los ciegos y ciegas «enfrentan desafíos en el caos inevitable provocado por el sonido de una alerta roja».
Por su parte, las personas sordas no pueden oír las alarmas durante un inminente ataque con cohetes, los autistas pueden verse abrumados por el estrés cuando se encuentran en peligro inmediato.
Y quienes enfrentan problemas de salud mental continuos los ven agravados por el peso de los ataques, las pérdidas de vidas y la situación de los rehenes.
Ayala Davidowitz, dirigente de la organización humanitaria judía JDC, describió en la charla los innumerables problemas que enfrentan los evacuados con discapacidades que ahora están alojados en hoteles y otros lugares de refugio.
El 17% de lo israelíes tiene alguna discapacidad
Sus camas pueden estar a la altura incorrecta, las duchas pueden ser inadecuadas, el acceso a los médicos, los regímenes habituales de medicamentos y terapias se han visto interrumpidos «y es necesario restablecer las necesidades de educación especial», afirmó.
Demanding the immediate release of all the hostages, among them people with disabilities, now!https://t.co/pt9LNaJADL
— ארגון בזכות (@BizchutOrg) October 16, 2023
Los cuidadores, a menudo un familiar cercano, sufren un trauma mental agudo y no pueden funcionar normalmente. «Hemos escuchado historias de discapacitados que perdieron a uno o dos padres a causa de Hamas y ya no tienen cuidadores. ¿Qué se hace en esa situación?», se preguntó Davidowitz.
«Todo el mundo conoce a alguien en el sur», donde ocurrieron las sanguinarias incursiones de Hamas, «todo el mundo conoce a alguien secuestrado, todo el mundo conoce a alguien asesinado», dijo por su parte Efrat Stern, directora de JDC Israel Unlimited.
Los problemas de salud mental «y el trauma son graves en todo el país», advirtió la experta.
De una población israelí de alrededor de nueve millones de personas, el 17 por ciento son discapacitados y alrededor del 50 por ciento de ellos tiene más de una discapacidad.
Mientras el país sigue sufriendo constantes ataques con cohetes que requieren múltiples escapes a refugios antiaéreos y ya 200.000 israelíes en total han sido desplazados de sus hogares, «todos están experimentando algún nivel de trauma», puntualizaron los expertos.