Once investigadores israelíes fueron elegidos por el Consejo Europeo de Investigación (ERC, por su sigla en inglés) para recibir cada uno un subsidio de 150.000 euros para «convertir su ciencia» en acciones prácticas.
El ERC, que forma parte de la Unión Europea, anunció este jueves una nueva ronda de 102 de sus becas de proof of concept, el proceso de prueba de concepto para la implementación de ideas o tesis científicas.
Las universidades de Israel figuran entre las más beneficiadas por el desembolso europeo, ya que once investigadores del país fueron elegidos para recibir el importante monto de dinero.
De hecho, Israel quedó en el séptimo lugar entre los que recibieron más subsidios proof of concept en esta tanda, detrás de Alemania (40), España (30), Gran Bretaña (26), Italia (25), Francia (22) y los Países Bajos (20), y por delante de Bélgica (15), Dinamarca (9) y Suecia (8).
Las Becas para los centros de estudios israelíes quedaron repartidos entre el Instituto Weizmann, la Universidad de Tel Aviv y el Technion (con tres cada uno), la Universidad Bar-Ilan y la Universidad Hebrea de Jerusalén (ambas con un subsidio).
La mayoría de las investigaciones destacadas por el ERC en Israel se centran en temas de la ciencia médica, como -por ejemplo- un estudio del Weizmann que apunta a curar el cáncer de ovario mediante terapia basada en autoanticuerpos.
Válvulas cardíacas y lucha contra los tumores
También aparecen científicos de la Universidad de Tel Aviv que están trabajando en una plataforma de detección de microARN para diagnóstico precoz y gestión de pacientes y expertos del Technion que están desarrollando válvulas cardíacas protésicas de flujo controlado.
En la Bar-Ilan, la elegida fue la profesora Rachela Popovtzer, que está trabajando en una nueva terapia para tratar tumores sólidos. La investigadora diseñó nanopartículas de oro recubiertas de insulina para que sirvan como una nanoplataforma de fármacos inmunoconjugados.
«Nuestro objetivo es lograr avances significativos en el desarrollo de la tecnología mediante la demostración de prueba de concepto de eficacia y seguridad en modelos de cáncer de mama», afirmó Popovtzer.
«Se necesita coraje y habilidad para llevar una idea del laboratorio al mundo de los negocios» donde la ciencia se convierte en una realidad, afirmó por su parte Iliana Ivanova, la comisionada europea de Innovación, Investigación, Cultura, Educación y Juventud.
Con la ayuda de las subvenciones, aportó la profesora Maria Leptin, presidenta del ERC, «nuestros beneficiarios pueden ir un paso más allá y probar el potencial de mercado de sus proyectos de investigación básica».
«La investigación impulsada por la curiosidad y la innovación van de la mano y el ERC se enorgullece de financiar ambos», completó Leptin.