El director ejecutivo y presidente de Pfizer, Albert Bourla, ganó el premio Genesis, conocido como el Nobel Judío, y anunció que donará el dinero que acompaña el galardón (un millón de dólares) para la creación de un museo del Holocausto en Grecia
Bourla, quien es judío, originario precisamente de la ciudad griega de Salónica, y considerado una de las personalidades clave en la lucha contra la pandemia de coronavirus, recibió el premio el miércoles de esta semana de manos del presidente de Israel, Itzjak Herzog.
Al frente del coloso farmacéutico, Bourla «no se dejó intimidar por los grandes desafíos, por los detractores, por las conspiraciones o por la política», afirmó el presidente israelí.
«Creía en la vacuna e invirtió cada gramo de sí mismo en realizar lo que en ese momento parecía una fantasía descabellada», continuó Herzog.
La vacuna, indicó, «se desarrolló a una velocidad récord, utilizando la tecnología del mañana para contener con éxito una pandemia devastadora».
Durante la ceremonia, celebrada en Jerusalén, Bourla se declaró «profundamente honrado» de recibir el premio Génesis, en particular porque -afirmó- «nunca me propuse ser famoso».
Además, añadió, «nunca imaginé que algún día estaría aquí con los ilustres nominados y ganadores anteriores: artistas, filántropos, estadistas y estadistas que muestran al mundo lo mejor que el pueblo judío tiene para ofrecer«.
Antes del directivo de Pfizer, otros ganadores del premio -que se concede desde el 2014- fueron el político y filántropo estadounidense Michael Bloomberg, el músico Itzhak Perlman y el director Steven Spielberg.
La historia de Bourla es «un símbolo de la notable vitalidad del pueblo judío»
Al igual que sus predecesores en el Genesis, Bourla anunció que donará el dinero que entrega el comité organizador, en su caso para la creación de un museo en Salónica que recuerde a las víctimas de la Shoá en Grecia.
Bourla nació en 1961 en Salónica, que era el hogar de una antigua comunidad judía con raíces en la antigüedad.
Esa vibrante población judía de 55.000 personas fue aniquilada casi por completo durante la ocupación nazi.
Los jóvenes padres de Bourla escaparon por poco de la muerte y se encontraban entre los 2000 sobrevivientes.
El Museo del Holocausto Griego, indicaron desde la fundación Genesis, «inmortalizará la historia de la comunidad judía griega desde la antigüedad hasta la era moderna».
Además del premio Genesis, Bourla recibió también durante su paso por Israel un doctorado honoris causa del Technion, la famosa universidad tecnológica con sede en Haifa.
«Como científico, y como judío, no puedo exagerar cuánto significa para mí recibir este título y ser invitado a dirigirme a la clase que se gradúa este año», afirmó el ejecutivo farmacéutico al recibir el doctorado frente a alumnos del Technion, también durante esta semana.
«La historia familiar de Bourla, como hijo de sobrevivientes del Holocausto de Salónica, es un símbolo de la notable vitalidad del pueblo judío, su vivacidad y su capacidad de renovación tras el Holocausto», resumió el presidente del Technion, el profesor Uri Sivan.