Una empresa alemana construyó una bicicleta eléctrica basada en tecnología israelí y que se puede fabricar de un día para el otro con una impresora 3D
La firma nFrontier, que tiene su base en Berlín, desarrolló esta nueva posibilidad de «imprimir» la revolucionaria bici eléctrica en casa en apenas tres meses. El vehículo fue bautizado Uila y cuenta con la tecnología de la israelí Stratasys.
Uila es básicamente un híbrido entre una bicicleta eléctrica de carga y un pequeño vehículo eléctrico (EV). De cuatro ruedas y dos asientos, puede llevar hasta 250 kilogramos de carga y acelerar a velocidades máximas de 25 kilómetros por hora.
«Por supuesto, es mucho más pequeño que un automóvil, pero aún así tiene un tamaño razonable» de 230 centímetros de largo, 170 de alto y 90 de ancho, con un peso total de 70 kilos, describió el portal 3DNatives.
El vehículo «es nuestra respuesta a algunos de los desafíos más apremiantes de nuestro tiempo, como el cambio climático y la crisis energética», afirmó el CEO de nFrontier, Daniel Buening.
Según el jefe de la firma de diseño de innovación, Uila «no solo está cambiando radicalmente la forma en que nos desplazamos, sino que también proporciona una solución de movilidad verdaderamente sostenible y revolucionaria».
«Al mismo tiempo -añadió-, ofrece un conjunto de funciones y activos digitales que superan con creces los estándares actuales de la industria de la bicicleta».
Uila «no hubiera sido posible sin los avances realizados por Stratasys»
3DNatives dijo que nFrontier actualmente está preparando la revolucionaria bici eléctrica Uila para la producción en serie y el registro de tráfico en Alemania «en algún momento del 2024».
El portal israelí NoCamels destacó que el desarrollo de Uila «no hubiera sido posible sin los avances realizados por Stratasys», una startup de Rehovot, unos pocos kilómetros al sur de Tel Aviv, que recientemente comenzó a cotizar en Bolsa.
Stratasys, señaló el reporte, «proporcionó las máquinas de impresión 3D» que permitieron a los ingenieros alemanes «producir prototipos en cuestión de horas, en lugar de esperar semanas o meses a que las empresas especializadas hicieran realidad sus planes».
La startup israelí, continuó, «diseña, produce y vende las máquinas» de impresión 3D, «que parecen hornos de microondas gigantes, para que sus clientes las utilicen dondequiera que se encuentren».
«No basta con tener una idea, se necesita la capacidad de crear prototipos rápidamente»
Mientras que las impresoras 2D tradicionales lanzan tinta sobre el papel, las impresoras 3D arrojan capas de polímero una encima de la otra, dando forma gradualmente a prácticamente cualquier diseño, recordó la nota de NoCamels.
UILA in Action! We revealed this prototype for sustainable mobility, combining eBike and Electrical Vehicle, last week at #formnext in cooperation with @_nFrontier. With a chainless electrical drive train, the vehicle accelerates to top speeds of 25 km/h. https://t.co/VeUKwWEUPD pic.twitter.com/ixAN3rWWSa
— Stratasys (@Stratasys) November 25, 2022
«No basta con tener una idea, se necesita la capacidad de crear prototipos rápidamente», reconoció Yonatan Snir, vicepresidente de marketing global de Stratasys.
«En este caso -explicó-, nos encargamos de la carrocería alrededor de la estructura metálica, del volante, de la silla y de todo lo que hay que poner dentro para que funcione».
Snir apuntó que, con estas tecnologías, «todo el ciclo es más rápido», y que los fabricantes «no dependen de otras empresas o cadenas de suministro para satisfacer sus necesidades».
Con la reciente pandemia de coronavirus, añadió, «vimos el desafío de enviar cualquier cosa desde cualquier lugar a cualquier lugar».
Ahora, «si tiene las máquinas, entonces puede hacerlo usted mismo», completó.
Como es el caso de esta revolucionaria bici eléctrica que se puede «imprimir en casa».