Israel renovó esta semana su sueño de llegar a la Luna: se presentó el proyecto de Bereishit 2, la nave espacial con la que el país espera poder, finalmente, alcanzar la superficie del único satélite natural de la Tierra
Además de su valor científico, el nuevo programa puede ser histórico por otra razón. Según afirmó el ministro de Ciencia y Tecnología de Israel, Yizhar Shai, al proyecto se podrían sumar, entre otros países, los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que firmó en setiembre un acuerdo para la normalización de las relaciones diplomáticas bilaterales.
El nuevo proyecto espacial prevé la construcción y lanzamiento -dentro de alrededor de cuatro años- de la nueva nave que, en realidad, estará conformada por tres vehículos, dos diseñados para alunizar y el otro para mantenerse en órbita.

Al igual que el programa del primer Bereishit (Génesis), también esta vez el proyecto estará a cargo de SpaceIL, en cooperación con Israel Aerospace Industries (IAI) y la Agencia Espacial del Ministerio de Ciencia y Tecnología de Israel.
«Iniciamos un nuevo camino, familiar pero diferente», dijo el presidente de Israel, Reuven Rivlin, durante la presentación del proyecto, el miércoles de esta semana en Jerusalén.
El programa, prometió Rivlin, «ampliará los límites del conocimiento humano con experimentos científicos innovadores, ayudándonos a comprender mejor el universo en el que vivimos».

Bereishit 1 fue lanzado el 22 de febrero del 2019 desde el centro de Cabo Cañaveral, en el estado norteamericano de Florida. Pero pocas semanas después, el 11 de abril del año pasado, una deficiencia en el giroscopio del módulo de alunizaje desembocó en la falla del motor principal y el choque de la sonda contra la Luna.
«Hace apenas un año y medio -recordó Rivlin-, estábamos aquí juntos, cuando Israel contuvo la respiración y miró a las estrellas, observamos ansiosamente a la nave espacial Bereishit en su histórico viaje a la Luna».
Cuando la nave se estrelló, «nos decepcionamos, pero también nos dimos cuenta de que teníamos que empezar de nuevo desde el principio», afirmó el presidente israelí.

Por su lado, el director ejecutivo de SpaceIL, Shimon Sarid, afirmó: «nuestro objetivo es alto con Bereishit, no solamente apuntamos al espacio exterior, sino al futuro a largo plazo del estado de Israel«, aseveró.
En cuanto a la participación internacional en el proyecto, el ministro Shai reveló que son al menos siete países los que expresaron interés de sumarse a la misión Bereishit 2.
«No tengo ninguna duda de que Bereishit una vez más despertará nuestra imaginación, redefiniendo los límites de lo posible y asegurando el estatus de Israel como una potencia de innovación», dijo Shai.