Los erizos de mar y otros animales de su familia de los equinoideos son mucho más viejos de lo que se pensaba y su presencia en la Tierra se remonta a unos 300 millones de años, por lo que nos pueden enseñar mucho sobre los peligros de la extinción
La clase de los equinoideos tiene una gran importancia «desde el punto de vista ecológico», señaló el biólogo marino Omri Bronstein, de la Universidad de Tel Aviv.
Bronstein, quien participó de la investigación junto a expertos de Estados Unidos, Inglaterra, Chile y Austria, remarcó que una eventual desaparición de estos animales «en un área en particular trae consigo cambios extremos».
Los investigadores, explicó el reporte de la universidad israelí, «combinaron un análisis filogenético de los genomas completos de 54 especies diferentes, dieciocho de las cuales no habían sido mapeadas hasta la fecha, y datación paleontológica utilizando fósiles de erizos de mar de todo el mundo».
«Para sorpresa de los investigadores -apuntó el informe-, los hallazgos revelaron que muchas de las especies aparecieron en la Tierra hace unos 300 millones de años, mucho antes (unos 50 millones de años) de la fecha generalmente aceptada por la ciencia» hasta ahora.
Esos datos llevaron a la conclusión de que más especies de las que se había pensado originalmente sobrevivieron al evento de extinción masiva que acabó con más del 80 por ciento de las especies en la Tierra hace 250 millones de años.
«Hoy estamos en medio de un evento de extinción generalizado», advirtió el doctor Bronstein
En el estudio, cuyos detalles fueron publicados en la revista especializada eLife, los investigadores afirmaron que el experimento produjo resultados que van «más allá del interés científico obvio».
«Creemos -precisaron- que una comprensión profunda de las especies que sobrevivieron» a aquel proceso de extinción «puede ayudarnos a lidiar con el evento de extinción actual, que ha estado ocurriendo durante décadas y está siendo causado en gran parte por humanos«.
Bronstein recordó que un buen ejemplo de las consecuencias de la desaparición de equinoideos se remonta a la década del ’80 del siglo pasado, cuando la población de erizos de mar en el Caribe fue devastada por una enfermedad.
Como resultado, las algas que solían alimentar a los erizos de mar aumentaron considerablemente, y su crecimiento descontrolado provocó la muerte de los arrecifes de coral.
Otro aspecto de este problema es la gran importancia económica de esta clase de animales (que incluye a varios tipos de erizos marinos), algunos de los cuales se consideran un manjar de lujo en un mercado internacional que genera alrededor de los mil millones de dólares al año.
«Hoy estamos en medio de un evento de extinción generalizado, solo que esta vez la actividad humana parece ser el principal impulsor», advirtió Bronstein.
Un estudio en profundidad de los eventos de extinción pasados, «las razones que llevaron a su ocurrencia y las especies que lograron sobrevivir a ellos, puede ayudarnos a lidiar con la extinción actual», completó el investigador israelí.