Los terremotos son devastadores porque son una sorpresa. Pero eso se puede moderar, brindando valioso tiempo para ayudar a salvar vidas y evitar daños.
Los terremotos son producto de la fuerza de la naturaleza y, obviamente, no se pueden evitar. Pero una empresa israelí desarrolló un sistema -basado en algoritmos, una red de sensores e inteligencia artificial- que puede alertar sobre la inminencia de un sismo y brindar a la población preciosos segundos que pueden salvar vidas.
SeismicAI tiene su base en Tel Aviv y en su equipo figuran expertos en física, un ex comandante militar y el profesor Alon Ziv, uno de los líderes mundiales en detección de terremotos en tiempo real y quien desarrolló los algoritmos sísmicos que utiliza el sistema.
El profesor Ziv es también parte del plantel académico de la Universidad de Tel Aviv, uno de los centros de estudios asociados a SeismicAI.
En el website de la universidad, Ziv explica que su trabajo «tiene como objetivo mejorar la comprensión de la mecánica de terremotos«.
Para entender cómo funcionan los movimientos sísmicos, los expertos abrevan en complejos y sofisticados estudios que incluyen el análisis de espacio-tiempo de catálogos de terremotos, el modelado numérico de fallas y la «comparación entre catálogos de terremotos simulados y naturales», entre otros tipos de investigaciones.
Todo ese bagaje de conocimientos se aplica al sistema de SeismicAI, que ya está desplegado en varias ciudades y regiones alrededor del mundo.
Comenzando por los sensores que chequean los movimientos de la Tierra hasta 500 veces por segundo, la enorme colección de datos pasa luego al sistema informático de SeismicAI.
El procesamiento de datos incluye etapas de «machine learning», es decir, que las computadoras «aprenden» sobre la marcha de sus funciones.
«Hemos visto en primera persona el impacto de la preparación deficiente y del desempeño técnico por debajo de los estándares frente a la llegada de terremotos», afirman los expertos de SeismicAI.
«Creemos que, con la previsión correcta, se puede evitar una gran cantidad de daños y pérdidas» frente a los sismos, añaden.
Para ello, el sistema de la firma israelí procesa continuamente y en tiempo real los datos provistos por los sensores y analizados por sus algoritmos.
Cuando se detecta una anormalidad, el sistema lanza una cadena de alertas que termina, por ejemplo, en los celulares de los habitantes o en los dispositivos de emergencia de instalaciones de energía, hospitales y escuelas.
Esos segundos vitales pueden ayudar a que los responsables de plantas nucleares o de electricidad tengan tiempo para desactivar maquinarias y evitar así explosiones o derrames tóxicos.