Dos empresas israelíes anunciaron esta semana que están trabajando en conjunto para transformar un vehículo aéreo no tripulado (UAV) de origen militar en un aspersor capaz de dedicarse día y noche a tareas de control de hierbas y fumigación en campos y plantaciones
La firma Adama, especializada en la protección de cultivos y con una importante presencia en Brasil, Argentina y Chile, puso en marcha el proyecto junto a Tactical Robotics, una subsidiaria de Urban Aeronautics, empresa líder del sector aeronáutico para la seguridad nacional y fuerzas militares.
El aparato en cuestión es el Cormorant, antes conocido como Air Mule, capaz de levantar vuelo verticalmente con 500 kilos de carga a bordo y que nació de necesidades militares de transporte y rescate en espacios demasiado peligrosos para operar con helicópteros.
Desde hace ya varios años, el Cormorant se viene utilizando en actividades civiles, desde el transporte de cargas a tareas de socorro y rescate en situaciones de desastres y emergencias.
Ahora le estaría llegando el momento de ayudar a los productores agrícolas, a través de la nueva versión Ag-Cormorant.
«La operación no tripulada del Ag-Cormorant y su diseño único promoverán un nuevo estándar de seguridad en la fumigación aérea» ya que, entre otras cosas, «elimina los riesgos de lesiones en pilotos y accidentes con rotores expuestos», dijeron las empresas en un comunicado.
Según el anuncio, «la capacidad del Ag-Cormorant para ajustar la altura y la velocidad de vuelo de acuerdo con la misión, en combinación con propiedades aerodinámicas únicas», permitirán «una mejor penetración de la cubierta, reducción de la deriva y capacidades de aplicación de tasa variable» del vuelo.
«Estamos muy entusiasmados de asociarnos con Tactical Robotics para desarrollar soluciones nuevas e innovadoras para la fumigación aérea», dijo Dani Harari, vicepresidente senior de Estrategia y Recursos de Adama.
«Creemos -continuó- que el Ag-Cormorant representa un método nuevo y mejorado para la aplicación aérea» de controles agrícolas.
«Nuestro objetivo es continuar brindando estos y otros servicios y productos valiosos para que los agricultores puedan optimizar los rendimientos y ayudarlos a crecer«, afirmó Harari.
«Cuando Adama se acercó a nosotros con sus ideas sobre el potencial del Cormorant para responder a algunas de las necesidades más apremiantes del sector agrícola, quedamos muy impresionados con el espíritu innovador» del proyecto, dijo por su lado Rafi Yoeli, CEO de Tactical Robotics.
Para Yoeli, «las capacidades únicas del Cormorant ofrecen soluciones a los desafíos en una variedad de sectores, y la participación y visión de Adama son una contribución importante para una aplicación valiosa» para el UAV.
Fuentes de Adama señalaron a IsraelEconomico que el proyecto apunta a exportar la nueva versión del Cormorant, en particular a «grandes mercados» -dijeron- como los de Estados Unidos, Brasil, Australia y Canadá, entre otros.
Según las cifras de los resultados financieros de Adama en el 2018, América Latina es la segunda región más importante para las operaciones de la empresa, con 935 millones de dólares (36,6% más que en el 2017), solamente detrás de los 1.058 millones de las ventas en Europa.