Incluso en medio de la complicada situación regional, Israel es uno de los cinco países más seguros del mundo para los viajeros, señaló un reconocido ranking preparado por una empresa estadounidense.
Los cincuenta países incluidos en el estudio, señaló el reporte de The Swiftest, una firma estadounidense de búsqueda analítica de seguros, fueron seleccionados en función de su popularidad entre los turistas.
Para determinar los lugares más peligrosos del mundo para los viajeros, los expertos de la compañía tuvieron en cuenta siete distintos factores para la clasificación, comenzando por las muertes por homicidio y por accidentes de tráfico.
Los otros cinco valores, tomados de fuentes como las Naciones Unidas y el Banco Mundial, son las muertes por envenenamiento y por malas condiciones de higiene, los años perdidos por enfermedades transmisibles y por lesiones y un indicador global de desastres.
Con esos números y estadísticas en las manos, el informe ubicó a Singapur como el país más seguro del mundo, seguido por Dinamarca y los Países Bajos. Luego aparecen Suiza e Israel, en ese orden.
El top ten lo completan Suecia, Austria, Irlanda, Italia y Alemania.
En contraste, los cinco países más peligrosos del mundo entre aquellos que son más atractivos para los turistas resultaron ser Sudáfrica, India, la República Dominicana, México y Brasil.
Los otros diez primeros puestos fueron, en este orden, para Camboya, Filipinas, Arabia Saudita, Vietnam e Indonesia.
«Rodeado por un redoble de noticias negativas» sobre el país, la encuesta de The Swiftest es «una sorpresa asombrosa», dijo el diario israelí The Jerusalem Post al comentar el informe.
Después de recordar que Israel también suele aparecer también en las listas de los países «más felices» del mundo, el reportero del Post se preguntó, «si las cosas van tan bien, ¿por qué me siento tan mal?».
«En el caso de la seguridad general, la razón es que no estamos comparando nuestra situación aquí con la de la mayoría de los demás países. Cuando lo hacemos, nuestra situación no se ve tan mal como a menudo se siente», especuló.
