No es casualidad que Scarlett Johansson haya elegido una historia de sobrevivientes del Holocausto para su debut como directora de un largometraje: a la famosa y talentosa actriz estadounidense le gusta presentarse como «una judía de Nueva York».
Durante una serie de entrevistas que ofreció con motivo de la salida del filme, Eleanor the Great, a la plataforma de streaming pago de Amazon, la protagonista de Lost in Translation (2003) y The Avengers (2012) compartió emotivos detalles de su familia y su conexión con el judaísmo.
También le puede interesar: El tikun olam de Marlee Matlin: un documental revela su lucha y su raíz judía
Eleanor the Great cuenta la historia de Eleanor Morgenstein, interpretada por June Squibb, quien se muda de Florida a la ciudad de Nueva York tras la muerte de su amiga de toda la vida, Bessie.
Cuando tiene que enfrentar en la Gran Manzana los desafíos de la vejez y la soledad, Eleanor se involucra con un grupo de sobrevivientes del Holocausto en un centro comunitario local.
En un intento por integrarse y superar su duelo, comienza a contar la historia de la vida de Bessie como si fuera la suya propia, lo que da lugar a una serie de malentendidos y complicaciones, que Johansson registró en su debut directorial en un largometraje.
Hablando con el portal israelí Ynet, Scarlett reveló un elemento clave en el proceso de producción de la película: «sin una conexión con el judaísmo no habría podido hacerla», reconoció.
Una abuela que hablaba idish
Johansson nunca ocultó sus raíces y en varias ocasiones contó que su madre es judía ashkenazi y su padre danés. «Celebramos las fiestas, incluyendo Iom Kipur, Janucá y Pésaj», rememoró.
«Mi abuela hablaba idish, pero desafortunadamente no aprendí el idioma» De todas maneras, «soy un judía de Nueva York que a menudo habla con las manos», se describió, divertida.
Y, en una entrevista con el Canal 12 de la televisión israelí, la actriz, de 40 años, dijo haber experimentado una conexión personal inmediata con el guion, escrito por Tory Kamen.
En realidad, opinó, «el guion me encontró a mí». En sintonía con las otras entrevistas que brindó a medios israelíes, Scarlett Johansson dijo que probablemente no se «habría sentido cómoda contando esta historia» o «comprender a los personajes, si no fuera judía».
Su conexión con la historia –recordó por su parte el Jerusalem Post- se basa en su propia historia familiar. Es que, en el 2017, la actriz descubrió que gran parte de la familia de su madre había muerto en el Holocausto.
«La familia de mi abuelo estaba en el gueto de Varsovia», reveló la ahora directora, quien además contó que, cuando fue al cine a ver La lista de Schindler (1993), era «muy joven, demasiado joven», y la historia «me impactó profundamente».
«Profundamente judía»
Eleanor the Great tuvo su estreno mundial en el Festival de Cannes, dentro de la sección Un Certain Regard, en mayo del 2025, donde recibió gran atención por el debut como directora de Johansson y el enfoque sensible sobre la vejez y la memoria.
Aunque algunas reseñas marcaron ciertas debilidades en su mano primeriza detrás de las cámaras y otros apuntaron sobre algunos baches en la narración, otros medios celebraron el estreno en cines, que en Estados Unidos fue a fines de setiembre último.
Para seguir leyendo: Johnny Cash, el Hombre de Negro que encontró inspiración en Israel
Por ejemplo, Unpacked Media dijo que, como directora, Scarlett Johansson «combinó con maestría momentos de humor y ternura, creando una obra que es a la vez profundamente judía y universalmente humana».
El Atlanta Jewish Times, por su lado, destacó «la actuación conmovedora de June Squibb, capaz de transmitir la fragilidad y el espíritu indomable de Eleanor», y consideró que la película logra «un equilibrio notable entre comedia y drama, sin perder la sensibilidad histórica».













