Mientras se espera el regreso de los cuerpos de los secuestrados que murieron en Gaza, en Israel se inunda con mimos a los rehenes que fueron devueltos con vida, y dos de ellos recibieron un regalo soñado: casacas de la selección argentina autografiadas por Leo Messi.
Según reportó la prensa israelí, detrás del gesto se encuentra Shai Graucher, un empresario que ya se acercó a otros rehenes liberados para darles un abrazo y un impactante regalo.
Graucher es un importante operador del sector del turismo VIP en Israel, acostumbrado a trabajar con ricos viajeros judíos de Estados Unidos. Después del ataque terrorista de Hamas del 7 de octubre del 2023, el empresario «puso a trabajar» esas conexiones.
Desde Jerusalén, donde vive con su esposa y sus cinco hijos, este judío ortodoxo se convirtió en el nexo de muchas familias pudientes de Estados Unidos que aportaron al bienestar de los soldados israelíes y de las víctimas de la invasión islamista del 7/10.
«Tengo una agencia de viajes VIP y mis clientes son judíos estadounidenses extremadamente adinerados que viajan a Israel para vacaciones, visitas familiares o eventos», contaba Graucher en marzo último.
Seis años en ese negocio le permitieron formar conexiones profundas con la comunidad hebrea norteamericana, y desde allí empezó a recibir la pregunta tras el ataque terrorista: ¿cómo se puede ayudar?.
Muchos de sus clientes no dudaron y comenzaron a firmar cheques por miles de dólares. En un primer momento, Graucher utilizó el dinero para asistir a soldados y víctimas del ataque, pero cuando Hamas empezó a liberar rehenes, fue el turno de los secuestrados que volvieron a casa.
Un BMW para Emily
El empresario se hizo famoso cuando le entregó nada menos que un lujoso automóvil BMW a Emily Damari, la ex rehén que se hizo conocida por su simpatía y por el hecho de que sus secuestradores le cortaron dos dedos de una mano.
Ahora, con la llegada de los últimos rehenes con vida, fue el turno de Bar Kupershtein y Segev Kalfon, fanáticos del capitán del Inter Miami y de la selección argentina campeona del mundo.
Kupershtein tiene ahora 23 años de edad, y al momento de ser secuestrado era un soldado de licencia en las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Kalfon, de 27, fue capturado por los terroristas durante el ataque contra el festival musical Nova.
Esta semana, ambos jóvenes –todavía alojados en el Hospital Sheba para reponerse de dos años en cautiverio en condiciones dramáticas- recibieron la visita de Graucher, quien llegó con el regalo sorpresa, la casaca del combinado argentino firmada por el GOAT del fútbol.
No mires a otro lado.
Así fueron secuestrados cinco jóvenes israelíes, hace exactamente 9 meses.
Siguen en manos de #Hamás: Elkana Bohbot, Bar Kupershtein, Evyatar David y Guy Gilboa.
Almog Meir fue rescatado por #Israel.#Libérenlos. pic.twitter.com/RnfFFeGqk3— Israel en Español (@IsraelinSpanish) July 7, 2024
Entrevistado por la prensa israelí, el empresario turístico explicó que las camisetas forman parte de un lote que el astro firmó poco después de ganar la final del Mundial 2022 de Qatar y que las obtuvo a través de los dueños del gigante de la indumentaria American Eagle, la familia judía estadounidense encabezada por Jay Schottenstein.
Graucher dijo que Leo Messi no sabía puntualmente que las casacas eran para los rehenes, pero que sí estaba al tanto de que iban a ser despachadas hacia Israel.
En las redes sociales se puede ver a Kupershtein y Kalfon emocionados al recibir el inesperado regalo. «Cualquier persona sueña con tener algo así», reaccionó Bar al recibir la casaca de Messi. Segev, muy delgado pero también con una sonrisa, solo atinó a besar la camiseta de su ídolo.
Un país «futbolero»
Aunque la selección local habitualmente se queda afuera de los mundiales y la liga nacional produce buenos jugadores pero pocos campeones internacionales, los israelíes son fanáticos del fútbol.
Esa relación se pudo comprobar también durante la reciente entrega de los rehenes que seguían con vida en Gaza, cuando algunos de ellos fueron fotografiados con las casacas de sus equipos favoritos muy poco después de recuperar la libertad.
El detalle fue registrado en la propia Argentina, la tierra de Messi, donde el principal diario deportivo del país, Olé, publicó un artículo contando que Gali y Ziv Berman se pusieron la camiseta del Maccabi Tel Aviv y Eitan Horn la casaca del Hapoel Beer Sheva.
Horn es uno de los tres rehenes de origen argentino devueltos esta semana por Hamas, junto a Ariel y David Cunio. También el hermano de Eitan, Iair, fue secuestrado por Hamas, pero liberado antes, en febrero de este año.
La familia de Iair y Eitan tiene sus raíces en el barrio de Villa Crespo, uno de los corazones judíos de Buenos Aires, y ambos son hinchas del popular club Atlanta, que milita en la segunda división del fútbol argentino.
En aquella ocasión, los dirigentes del club identificado con la colectividad judía de Buenos Aires le hicieron llegar a la familia Horn camisetas del equipo, para que puedan alternar con las del Hapoel Beer Sheva.
Graucher es amplio cuando se trata de fútbol. En marzo de este año, pocos días después de haber sido devuelto por Hamas, otro secuestrado, Omer Shem Tov, recibió del empresario una casaca de su ídolo, el brasileño Neymar, con dedicatoria: «Omer, keep safe» (Omer, cuídate).