La ciudad de Eilat, el popular balneario en el extremo sur de Israel, está afrontando los graves problemas causados por los cohetes lanzados por los hutíes de Yemen, que dejaron a su puerto en serios problemas.
Pero, incluso en estos momentos complicados, la ciudad está disfrutando una alentadora marea de turistas que llegan para disfrutar sus playas y atracciones.
Eilat, sobre el Mar Rojo, se convirtió rápidamente en uno de los blancos favoritos de los hutíes. El grupo islamista viene disparando cohetes contra el territorio israelí desde que estalló la guerra en Gaza, poco después del ataque terrorista de Hamas del 7 de octubre del 2023.
Los hutíes, patrocinados y armados por Irán, tienen en jaque a todo el tráfico marítimo en el Mar Rojo, y las operaciones en el puerto de Eilat no fueron la excepción: a mediados de este mes, la municipalidad local confiscó las cuentas bancarias de la empresa que gestiona la terminal.
La compañía estaba atrasada en el pago de los impuestos, pero también tenía problemas para gestionar las actividades normales del puerto y afrontar el pago de salarios: bajo los misiles hutíes, muchas empresas navieras abandonaron la ruta.
Un puerto demasiado importante
Los últimos reportes señalan que el puerto de Eilat podría ser eventualmente nacionalizado, ya que es una terminal de gran importancia para el país, no solo para el comercio sino también para la llegada de equipos para las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Entre las medidas para salvar la situación, indicó un informe del portal Calcalist, se está analizando la imposición de una ruta a Eilat a través del Canal de Suez para todos los buques que lleguen al país trayendo automóviles fabricados en países del este asiático.
El de Eilat es el tercer puerto más grande de Israel y puerta de entrada clave para mercancías despachadas desde China, India y Australia, entre otros países. Las importaciones incluyen automóviles y petróleo, y las exportaciones principales desde Eilat son minerales y fertilizantes.
חוב של 10 מיליון שקל: מאחורי סכנת הסגירה של נמל אילת https://t.co/jsXQggV0x5 pic.twitter.com/d8WYPOHFsD
— Globes גלובס (@globesnews) July 16, 2025
Pero la terminal, que también suele recibir cruceros, registró en los últimos meses una caída de hasta el 90 por ciento en sus actividades.
Una «explosión» de turismo
Mientras los ministerios de Transporte y de Economía, junto a la municipalidad y la empresa que controla el puerto de Eilat, estudian las soluciones a la crisis en la terminal marítima, la ciudad está disfrutando un inesperado auge turístico.
Después de la Guerra de los Doce Días contra Irán y de las varias incursiones aéreas sobre los hutíes, muchísimos israelíes volvieron a elegir las playas del sur. Se trata de una verdadera «explosión demográfica» en la ciudad, describió el portal noticioso Mako.
Fuentes del sector hotelero, citados en el informe, indicaron que la ocupación de las habitaciones para los veraneantes se encontraba en estos días en el 85 por ciento y que podría llegar pronto a los 90 por ciento, en medio de las altas temperaturas del verano boreal.
La ciudad, añadió Mako, ya se está preparando para la llegada de muchos vacacionistas en agosto, y la asociación de hoteles de Eilat señaló que nota «una gran demanda para setiembre».
Es una merecida situación para los empresarios y trabajadores de los hoteles del balneario, que se distinguieron por su patriotismo en las horas siguientes a la invasión del 7/10, cuando tuvieron que alojar de emergencia a miles de evacuados que llegaron desde la zona atacada.
«Ahora -apuntó Mako-, están recibiendo felizmente a los muchos vacacionistas».













