Un popular investigador del Museo Británico, de Londres, aseguró que una tablilla babilónica, a la que describió como el mapa más antiguo del mundo, contiene la ubicación del Arca de Noé, la nave bíblica que soportó un diluvio y rescató la fauna y la flora de su época.
En un video difundido por el famoso museo inglés en su cuenta de YouTube, el arqueólogo Irving Finkel contó que, junto a una de sus estudiantes, Edith Horsley, encontró un elementos faltante del mapa babilónico.
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Finkel es un experto en el tema: en el 2013 publicó el libro The Ark Before Noah, que decodifica el evento que se cree ocurrió hace unos 5.000 años y los artefactos asociados a esa aventura.
Por su parte, la tablilla, conocida como Imago Mundi, fue hallada durante una serie de excavaciones en Irak en 1882, y desde entonces presentó un gran desafío de traducción para científicos y lingüistas.
El mapa que aparece en el objeto arqueológico, hecho de arcilla y alojado en el Museo Británico, muestra el mundo tal como lo conocían los babilonios en aquel momento (aproximadamente el siglo VI antes de la era cristiana), con un diseño que gira alrededor del río Éufrates.
La tabla, de 12,2 por 8,2 centímetros, incluye varios párrafos de texto cuneiforme (la forma de escritura más antigua del mundo, anterior a los jeroglíficos egipcios antiguos) en ambos lados de la arcilla.
También muestra ocho formas que los investigadores interpretan como montañas a las que se hace referencia en el texto.
Una sugerente conexión entre la tablilla y la Biblia
Un conexión entre la tablilla y la historia del Arca de Noé es la inclusión de la palabra parsiktu. La revista Artnet recordó que el término «aparece sólo en otra tablilla babilónica» hallada por arqueólogos y donde se habla de un barco que sobrevivió al Gran Diluvio.
Al parecer, el término se refiere al tamaño de una nave capaz de capear un desastre climático de esa magnitud y aparece en el texto de la parte posterior de la tablilla como una «clave secreta» para viajeros.
Siempre según esta interpretación, aquellos que se arriesgaran por esa ruta de la antigüedad debían estar atentos a la presencia de «algo tan grande» como una nave parsiktu.
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Otro pasaje parece mostrar un camino a Urartu seguido de instrucciones sobre cómo llegar allí. Antiguos poemas mesopotámicos señalan que Urartu es el lugar donde un hombre y su familia desembarcaron de un arca gigantesca que habían construido para enfrentar un diluvio.
De Gilgamesh a Noé
Urartu sería nada menos que el monte Ararat, en Turquía, señalado desde hace mucho tiempo como el lugar adonde habría terminado el gran barco construido por Noé.
¿Cuál es la importancia de que aparezca en la tablilla? Según Finkel, sirve para confirmar, de alguna manera, la historia bíblica.
«Demuestra que la historia era la misma y, por supuesto, que una llevó a la otra, pero también que, desde el punto de vista babilónico, se trataba de un hecho», no de una leyenda, señaló el arqueólogo británico.
La historia del Diluvio de Gilgamesh se conoce por varias tablillas babilónicas de arcilla que datan de hace más de 3.000 años, mientras que el diluvio del que habla la Biblia habría ocurrido hace unos 5.000 años.
